La Asamblea General de la ONU decretó en el 2011 que el 21 de marzo de cada año se celebre el Día Mundial del Síndrome de Down, con el objetivo de generar una mayor conciencia pública sobre esta cuestión y recordar las valiosas contribuciones de las personas con discapacidad intelectual como promotores del bienestar y de la diversidad de sus comunidades, buscando resaltar la importancia de su autonomía e independencia individual, en particular la libertad de tomar decisiones.
En nuestro Colegio Bajo Molle, alumnos y alumnas de todos los niveles vinieron con sus calcetines cambiados evocando la trisomía del par 21, que da origen al Síndrome de Down, y compartieron en redes sociales sus fotografías con el hashtag #InclusiónenCBM.
Nuestro equipo del Programa de Acompañamiento y Desarrollo Educativo (PADE), llevó a cabo una actividad junto a los más pequeños de nuestro colegio, los cursos de kinder y primero básico, donde explicaron de qué trata el Síndrome de Down y las formas en que podemos ser inclusivos.
Si bien en el establecimiento no contamos con alumnos que presenten esta condición, reconocemos la importancia de visibilizar a las personas que sí, ya que somos seres que viven en sociedad y debemos incentivar el respeto y la inclusión.
